Una vida de fidelidad. Encarnita Ortega Pardo
"En marzo de 1941: Encarnita asistió a una tanda de ejercicios que dirigía san Josemaría Escrivá, Fundador del Opus Dei. Ese suceso inesperado iluminó toda su vida (...) Encarnita se sintió, desde el primer momento, comprometida con Dios. Recibía una llamada en primera persona sabiendo que, en su diálogo con Dios, había un yo y un tú. Su relación con Él era íntima y filial. La fidelidad se convirtió en el norte de su vida”
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